Planeación estratégica, ¿qué es? ¿qué ventajas aporta?
La planeación estratégica es una herramienta fundamental para el crecimiento y éxito de las microempresas y emprendimientos. Permite definir una dirección clara, establecer metas y objetivos, además de trazar un plan de acción para alcanzarlos. ¿Pero qué es?, ¿y cómo influye sobre los emprendimientos?
En esta guía, te presentaremos los pasos clave para llevar a cabo una efectiva planeación que contribuya al crecimiento de tu negocio. Desde la determinación de la posición actual hasta la ejecución del plan, exploraremos todo lo necesario para impulsar tu emprendimiento hacia el éxito.
¿A qué se denomina planeación estratégica?
Es un proceso gerencial que tiene como objetivo establecer la dirección y el enfoque de una organización a largo plazo. Consiste en definir los objetivos y metas principales de la empresa, así como los pasos y recursos que son necesarios para alcanzarlos.
Aquí, se analiza la situación actual de la organización mientras se evalúan los factores internos y externos que pueden afectar su desempeño. Con base en esta evaluación, se definen la visión, misión y valores de la empresa, que representan su propósito, sus aspiraciones además de los principios que guiarán su actuar.
¿Cuáles son sus ventajas para el corto, mediano y largo plazo?
A su vez, trae consigo diversas ventajas, según el tiempo desde su aplicación. Por ejemplo:
• Corto plazo. La planeación proporciona una visión clara de los objetivos y metas inmediatas de la organización. Esto permite a los equipos concentrarse en tareas y acciones específicas.
• Mediano plazo. Una estrategia clara brinda estabilidad y cohesión a la organización. Así, se ayuda a alinear todos los esfuerzos y reducir la incertidumbre.
• Largo plazo. Los objetivos estratégicos a largo plazo buscan un crecimiento sostenible y la consolidación de la organización en el mercado. Esto también permite lograr una ventaja competitiva.
Etapas de la planeación estratégica
Vamos directamente con las etapas que implica todo el proceso:
Etapa 1: análisis de la situación actual en la planeación estratégica
Aquí es donde comienza, pues hay que analizar en qué situación estamos.
Evalúa el entorno
En esta etapa, se realiza un análisis del entorno externo e interno de la organización. Se evalúan factores como la competencia, las tendencias del mercado, la economía, la tecnología y el contexto político. Además, se identifican las oportunidades y amenazas que pueden afectar a la organización.
Identifica tus fortalezas, debilidades y amenazas
En esta fase, se evalúan los recursos, capacidades y competencias internas de la organización. Se identifican las fortalezas que pueden ser aprovechadas para alcanzar los objetivos, así como las debilidades y amenazas que deben ser abordadas para evitar obstáculos en el camino.
Define tu mercado objetivo
Es fundamental definir claramente el mercado objetivo al que la organización dirigirá sus esfuerzos. Esto implica identificar a los clientes potenciales, segmentos de mercado y nichos específicos a los que se quiere llegar.
Etapa 2: definición de la visión, misión y valores
Luego, se da un paso más allá. Este, implica definir:
Visión
La visión representa la aspiración a largo plazo de la organización, la imagen deseada en el futuro. Debe ser inspiradora y motivar a todos los miembros de la organización a trabajar hacia una meta común. Por ejemplo, crecer sin que esto afecte a la calidad de los servicios.
Misión
La misión describe la razón de ser de la organización y su propósito fundamental. Debe ser clara y concisa, transmitiendo qué hace la organización, para quién y cómo lo hace. Por ejemplo, tratar de cambiar al mundo con tus productos.
Valores de la planeación estratégica
Los valores son los principios y creencias fundamentales que guían el comportamiento y la toma de decisiones de la organización. Estos deben ser coherentes con la visión y misión de la empresa. Por ejemplo, ser una compañía inclusiva.
Etapa 3: establecimiento de objetivos y metas
En este punto habrá que pensar y calcular los objetivos y metas. Más específicamente:
Objetivos estratégicos
Los objetivos estratégicos son las metas generales que la organización quiere alcanzar a largo plazo. Deben ser específicos, medibles, alcanzables, relevantes y con un límite de tiempo. Por ejemplo, vender un producto que se diferencie de la competencia en menos de 6 meses.
Metas específicas
Son los logros concretos que se deben alcanzar para cumplir los objetivos estratégicos. Estas metas deben estar alineadas con la visión, misión y valores de la organización. Por ejemplo, lograr un volumen determinado de ventas a los 3 meses de abrir.
Etapa 4: desarrollo del plan de acción para la planeación estratégica
¡Ya estamos avanzando! Ahora, debes:
Estrategias
Las estrategias son los enfoques y planes generales que se utilizarán para alcanzar los objetivos y metas establecidas. Pueden abarcar diferentes áreas, como marketing, operaciones, recursos humanos, entre otras.
Presupuestos
El plan de acción debe incluir una asignación de recursos y presupuestos para cada estrategia y objetivo. Esto garantiza una administración eficiente de los recursos y la viabilidad del plan.
Responsables y plazos
Cada estrategia y meta debe tener asignados responsables y plazos específicos. Esto asegura que haya un seguimiento y control efectivo durante la implementación del plan.
Etapa 5: implementación y seguimiento de una planeación estratégica
Finalmente, la planeación estratégica culmina con:
Puesta en marcha
Una vez desarrollado el plan de acción, se procede a la implementación. Es importante comunicar claramente los objetivos y metas a todos los miembros de la organización y asegurarse de que comprendan su rol en el proceso.
Seguimiento y evaluación
Durante la implementación, es esencial realizar un seguimiento continuo para evaluar el progreso y el cumplimiento de las metas. Esto permite identificar posibles desviaciones y realizar ajustes cuando sea necesario.
Flexibilidad y adaptabilidad de la planeación estratégica
La planificación debe ser flexible y adaptable, ya que el entorno y las condiciones pueden cambiar con el tiempo. Es importante estar dispuesto a realizar ajustes en el plan para garantizar su eficacia y relevancia a lo largo del tiempo.
La planeación estratégica es esencial para impulsar el crecimiento y el éxito de tu emprendimiento. Al seguir esta guía podrás establecer una visión clara, definir objetivos específicos y desarrollar un plan de acción efectivo. Recuerda que debe ser un proceso dinámico y adaptable, que te permita responder a los cambios del entorno empresarial. ¡No pierdas de vista tus metas y trabaja con determinación para alcanzar el éxito que deseas!